Dijo alguna vez el filósofo Séneca: “la lealtad que fue comprada con dinero… puede ser vencida con dinero”.
Lealtad al poder; lealtad a los cargos; lealtad a los countries; lealtad a los yates; lealtad a los bolsos; lealtad a la guita. Lo que pasó el 17 de octubre en Sarandí fue Cristina, afuera. Alberto, afuera. El día que Sergio Massa necesitaba lealtad… recibió soledad; recibió hostilidad; lo dejaron absolutamente solo.
¿Por qué? Porque saben que pierde; porque la única lealtad que tienen es a los cargos.
¿Qué piensa Cristina realmente sobre Sergio Massa? Lo detesta; lo odia; lo abomina; lo rechaza profundamente; entonces, como sabe que pierde, lo dejó solo;
Ahora… ¿qué piensa Massa realmente sobre Cristina? ¿Y qué piensa Axel Kicillof realmente sobre Sergio Massa? ¿Y qué piensa realmente Alberto Fernández sobre Axel Kicillof?
Entonces, primera conclusión; la única lealtad del kirchnerismo es a la guita y al poder; se odian pero se unen solamente para mantener el poder y el statu quo.
¿Qué los mantiene unidos? Defender estos privilegios. Esto es lo que mantiene unido al kirchnerismo. A esto le tienen lealtad.
Esto tienen en común: Insaurralde; Sujarchuk; De Jesús; Espinoza; De Vido; José López; Milagro Sala; Cristina y Alberto. Todos odian al capitalismo pero todos viven en esos countries hermosos con lotes espléndidos con mansiones dignas de Hollywood.
Massa no se hace cargo de ser el pero Ministro de la Economía de la historia. Agarró un dólar a $300 y hoy está a $1000. Generó 2 millones más de pobres. En un año de Ministro de Economía, destruyó el valor del peso.
Milei no tiene equipo. Sin un solo gobernador y con apenas el 20 por ciento de los diputados y el 10 por ciento de los senadores propios. En un país democrático, así no se puede gobernar de otro modo que no sea el autoritarismo.
Este domingo, tenemos la oportunidad de terminar con 20 años de corrupción del gobierno Kichnerista, que ha dañado profundamente a nuestro bendito país. Tenemos la responsabilidad de defender la Democracia, una vez más. Tenemos la obligación de ejercer nuestro derecho a elegir. A saber que hay un país diferente. A saber que hay un proyecto que nos va a ayudar a salir adelante. A saber que hay un equipo con experiencia y responsabilidad. A saber que podemos ilusionarnos con un mañana mejor. Lejos del miedo que imponen los que gobiernan. Nos amenazan con que si no son ellos, “se pudre”. El pueblo ha manifestado que ya no tolera más, que ya no aguanta más. ¡Vamos por un país ordenado! #EsAhora. ¡Y es para siempre!
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