107 AÑOS DE PERIODISMO DEMOCRÁTICO
Hoy 5 de marzo nuestro ALEM está cumpliendo años, contra viento y marea, sobreviviendo a base de luchas y tesón tantos embates de dictaduras, censuras, oscurantismo, desmemorias y pretensiones de personalismos por sobre las ideas.
Sin embargo, desde la vieja casona de Del Valle 63, el ALEM sigue guiando como un faro, aprendiendo de errores, rejuveneciendo con sangre joven, llorando a los que se van pero al fin, sembrando radicalismo.
Aquel radicalismo que nació revolucionario, que maduró en las callosas manos de hombres y mujeres de este, nuestro pueblo, que desde 1916 han creído en las ideas y conductas de aquellos que como Don Leandro Alem proclamaban y luchaban por la libertad y la república; que sabían que la política se trata siempre de una cuestión moral, de principios y de honradez.
Este año que cumplimos 40 años de democracia inédita en la historia de nuestro país, que no nos confundan a los radicales las mezquindades y las luchas intestinas; recordemos aquello que sostenía Don Ricardo Balbín “No importa tanto entonces quien lleva el palo, lo importante es la bandera.”
La bandera del Radicalismo con mayúsculas, el democrático, el revolucionario, el intransigente que mira más allá de los personalismos coyunturales. Ese Radicalismo tiene este año también otro desafío, el de mantener vivo el ideario de Alem y de Yrigoyen en las instancias electorales que deberemos enfrentar. El periódico ALEM seguirá siendo el candil en la tormenta, el que marque el camino, el que no nos deje olvidar lo que somos: ORGULLOSAMENTE RADICALES.
Y entonces como siempre, desde la casona familiar de Del Valle 63, habremos de seguir convocando a trabajar sin aflojar por nuestro pueblo, por nuestro país. A los tibios, a los flojos de memoria, a los que se les olvidaron las palabras para honrar a nuestros mayores, les llegará sin duda nuevamente el mensaje de Don Leandro: “Que se rompa, pero que no se doble. Adelante los que quedan”
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