Por María Eugenia Gil
Imaginemos por un momento la posibilidad de generar un proceso de desarrollo territorial, educativo.
Si nos detuviéramos en solo algunos puntos y llegáramos a un acuerdo y hacerles la vida más amable a los trabajadores.
Se necesitan acciones en la agenda educativa y fomento de la inversión.
Cuando vemos las encuestas o charlamos con amigos y familiares el descontento resuena, no sólo en la dirigencia política, también en la comunicacional, sindical, judicial, seguro te cuesta encontrar en que confiar.
El hoy se caracteriza por la imprevisibilidad y la incertidumbre.
No es para menos, 8 de cada 10 jóvenes que tienen posibilidades se quieren ir del país, 16 de cada 100 no termina el ciclo escolar, 7 de cada 10 argentinos creen que la educación está peor, y creen que aún estará más comprometida. Los niveles inflacionarios peores que hace 30 años que quiebra en el cortísimo plazo cualquier luz de esperanza.
Pero también, si miramos a nuestro alrededor vemos a emprendedores, empresarios, jóvenes que creen en nuestro país, nuestra provincia y nuestra ciudad, que todos los días más allá de la queja enfrentan el día a día, existe entonces una posibilidad.
Esa posibilidad debe ser encarada con un nuevo y distinto pacto social en el acuerdo de al menos 2 puntos básicos, educación de calidad y fomento de la inversión, para este último deben existir reglas de juego claras, precisas, una salida es la mirada puesta en emprendedores y las pymes que concentran más del 66% del trabajo.
Es mirar un poco más allá, de la incertidumbre y el desánimo, o bronca, es creer en nosotros mismos. En dirigentes que plantean la educación como eje central del desarrollo.
Hoy estamos atravesando, dentro de la revolución tecnológica, el imperio de la inteligencia artificial que configura y configurará un nuevo mundo, vivimos en el mundo más cambiante que hayamos podido imaginar, aquí la educación es piedra basal del desarrollo.
Estas acciones las debemos llevar adelante juntos, los ciudadanos y la dirigencia política que está a la altura de las circunstancias, no todo es igual, y no todo es lo mismo.
Donde vemos un problema, también existe una gran posibilidad, ver más allá de la crisis y confiar en los ciudadanos que quieren una educación de calidad abierta al mundo con fomento del empleo.
Debemos tener visión, que exceda un simple plan, una visión con un modelo político, social y económico, equilibrado, sostenible y competitivo.
María Eugenia Gil – Presidente UCR Bragado
Fuente: Infonoroeste
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